La carrera almeriense recupera la máxima categoría del circuito europeo para su edición de de 2018.

Así lo han confirmado los calendarios que la Unión Ciclista Internacional ha hecho públicos tras las distintas reuniones y comisiones celebradas en la ciudad noruega de Bergen con motivo de los mundiales de ciclismo, y que como es tradición, sirven también de soporte para que las más altas instancias del ciclismo mundial definan los calendarios, reglamentos y demás consideraciones que regirán el deporte ciclista durante el próximo año. En este año, además, ha sido escenario de la elección del nuevo de presidente de la UCI, el francés David Lappartient.

En este aspecto, la Comisión de Ruta ha considerado favorablemente la petición de subida de categoría de la Clásica de Almería, que de este modo, pasa a enmarcarse en la máxima del circuito europeo. En 2018, será la única carrera española de un día en esta división, que compartirá con carreras internacionales de gran tradición como la Kuurne – Bruselas – Kuurne, la Flecha Brabançona o la Paris – Tours.

No cabe duda, que el hecho de que la prueba almeriense sea en 2018 una carrera 1.HC, supone un reconocimiento a la calidad y a nivel organizativo de esta, lo que ha sido avalado año tras año por los comisarios internacionales que han asistido a la carrera en las últimas ediciones y que así lo han recogido en sus informes. Pero también a la implicación de la sociedad e instituciones almerienses, cuyo apoyo es, y ha sido, indispensable para alcanzar este nivel, pues no en vano, este aspecto es, también, evaluado por la Comisión de Ruta junto con la cobertura mediática y el nivel de corredores y equipos participantes.

5 aspectos han sido esenciales para la consecución del ascenso (calidad organizativa, apoyo institucional y social, seguridad, repercusión en medios de comunicación y participación) es en este último en el que más repercusión tendrá, a nivel deportivo, la subida de categoría. Pues incide directamente en el número de equipos UCI World Tour que pueden concurrir a la prueba.

En este mismo aspecto, otro punto a tener en cuenta es que se aumenta también el número de puntos UCI que la prueba reparte para el calendario europeo, lo que la hace aun más atractiva para equipos y ciclistas. Y sin duda será marcada como un objetivo importante de la temporada por algunos de los grades nombres del pelotón internacional.

Todo esto no hará más que reforzar aún más la calidad de equipos y corredores participantes, en una carrera que ya cuenta año tras año con una gran participación. Favoreciendo un espectáculo deportivo de primer nivel y una gran difusión tanto de la prueba, como de la provincia de Almería.

Hay que recordar que la Clásica de Almería ya estuvo, durante dos ediciones (2013 y 2014), enmarcada en la categoría 1.HC. En ese momento, las dificultades que los condicionantes económicos supusieron, agravados por la irrupción de carreras de la península arábiga con las que tenía imposible competir en este aspecto, dificultaron que la carrera pudiese contar con el número de equipos UCI World Tour suficientes para mantener la categoría, por lo que la UCI se vio obligada a recalificarla como 1.1. Categoría que ostentaba hasta este año.

Pese a todo, con la percepción de que la carrera almeriense estaba en el buen camino, la organización, junto con las instituciones y toda la sociedad almeriense, han seguido trabajando en esa buena dirección, consiguiendo de nuevo el ascenso a la máxima categoría del circuito europeo (sin duda el más importante y prestigioso de los circuitos continentales) y demostrando por qué la Clásica de Almería es vista con tan buenos ojos tanto por la Unión Ciclista Internacional como por los mejores equipos del mundo.

Con esta buena noticia, la Clásica de Almería 2018 echa a andar, subiendo otro escalón, y esperando que con el apoyo de las instituciones y la sociedad almeriense, siga reforzando aun más su proyección internacional y dejando entrever una muy prometedora próxima edición.